Acompañados por sus padres y educadoras, los niños y niñas dieron gracias por los aprendizajes y experiencias vividas durante este tiempo, mirando con gratitud el camino recorrido y con esperanza el futuro que les espera.
Como parte de la ceremonia, los estudiantes recibieron un regalo significativo: una Cruz, confeccionada por sus compañeros mayores de III° Medio. Este gesto simboliza que el nuevo camino que emprenderán está guiado por la Fe y acompañado por el apoyo de toda la comunidad educativa.
Con este envío, el nivel de Kínder se despide con alegría y confianza, listos para dar el siguiente paso en su formación integral, siempre bajo el cuidado y amor de Dios.